Aceite de coco: Usos y beneficios
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El aceite de coco es el resultado de prensar la pulpa de la semilla de coco -sí! el coco es una gran semilla- que se obtiene de la palma de coco. Se diferencia de la manteca o mantequilla de coco en que ésta conserva la fibra y la grasa del coco, mientras que el aceite es sólo eso, grasas purificadas y libres de fibra. En primer lugar, cabe destacar que no hay uno mejor que otro! simplemente son productos diferentes a los que podemos dar distintos usos.
El aceite de coco se caracteriza por ser un aceite sólido y blanco en temperaturas frías (de ahí que se confunda con la mantequilla de coco), pero que se convierte en un líquido transparente o levemente dorado al exponerlo al calor. En nuestro país, el aceite de coco se ve líquido de noviembre a marzo, y se torna sólido el resto del año.
Este aceite es alto en grasa saturada, lo que lo convierte en un compañero ideal en la cocina! Es resistente a altas temperaturas, a la oxidación y la rancificación, por eso es ideal para hacer sofritos, sopas, recetas horneadas, salteados y todo lo que tenga que ver con calor. Cuando lo aplicas sobre la piel sus actúa ‘encerrando’ la hidratación natural de tu cuerpo, manteniendo la suavidad e hidratación.
Además, este aceite contiene ácidos grasos con propiedades antibacterianas y fungicidas que son efectivos tanto interna como externamente, convirtiendo al aceite de coco en un fortalecedor del sistema inmune muy efectivo, con un amplio rango de propiedades medicinales.
¿Cuáles son los principales beneficios que se asocian a su uso y consumo?
Salud para el corazón
Las grasas saturadas presentes en el aceite de coco aumentan el colesterol HDL (también conocido como colesterol ‘bueno’) y convierte el LDL (conocido como el ‘malo’) en HDL, osea, al malo lo vuelve bueno! De esta forma, ayuda a bajar el colesterol y mejorar la salud del corazón en general.
Sistema inmune fuerte
El ácido láurico presente en el aceite de coco es conocido por combatir bacterias presentes en el cuerpo y crear un ambiente poco amigable para los virus. El aceite de coco incluso mejora la habilidad de tu cuerpo para absorber vitaminas, mejorando tu salud en general.
Piel y cabello hidratados
El aceite de coco es un excelente hidratante corporal, libre de ingredientes nocivos y artificiales. En el cuidado de la piel, mientras más simple mejor!, por eso es buena idea aprovechar sus propiedades humectantes y bactericidas sobre la piel. Usar aceite de coco puro y comestible es un gran tratamiento para la piel seca, con dermatitis, eczema, psoriasis y caspa.
¿Cómo aprovechar al máximo sus beneficios?
En primer lugar, elige un aceite de coco puro, prensado en frío, extra virgen y sin refinar, de preferencia orgánico. En la sección «aceites» encuentras distintas opciones, todas de excelente calidad.
Aplica directamente sobre la piel después de la ducha, así crearás una barrera para mantener la hidratación natural de tu piel, mientras la proteges de agentes ambientales.
Usa como máscara de tratamiento sobre las puntas del cabello. Masajea 1 cucharada de aceite sobre el pelo húmedo o seco, incluye el cuero cabelludo! deja reposar al menos 6 horas y luego enjuaga.
Mezcla una cucharada con tu café para añadir más energía a tu día.
Usa una pizca de aceite de coco para quitar tu maquillaje, sólo masajea sobre la piel y luego retira con una toalla de algodón humedecida en agua tibia.
Deja un frasco de aceite de coco junto a tu cocina, y úsalo cada vez que hagas algo al fuego.
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